Uno de los juegos más esperados del año (sino el que más), salió por fin ayer. Con un impresionante 96 de metacritic score y una acogida por parte de la crítica y la prensa, The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, va a marcar un nuevo estándar tal y como lo hizo su predecesor.
¿Qué le gusta tanto a la crítica?
El juego ofrece una narrativa potente y emocional, con momentos épicos que mantienen el legado de la saga.
En cuanto a la jugabilidad, Tears of the Kingdom se basa en el mundo abierto de su predecesor, pero introduce nuevas habilidades para el protagonista, Link. Estas habilidades amplían enormemente las posibilidades de acción, permitiéndonos interactuar de formas sorprendentes con el entorno. El juego fomenta la experimentación y la creatividad, ofreciendo múltiples formas de resolver los puzles y desafíos. Los controles son familiares, pero la sensación al jugar es completamente nueva y refrescante.
El mundo de Hyrule ha sufrido cambios significativos desde la entrega anterior, con un terreno modificado y nuevos lugares por descubrir. El diseño de niveles está cuidado al detalle, guiándonos para que nunca nos sintamos perdidos (pero sin asumir que seamos tontos) y brindándonos constantes sorpresas. El juego ofrece una gran variedad de actividades, desde misiones principales y secundarias hasta la búsqueda de tesoros, la ayuda a los habitantes del reino y la exploración de santuarios. Estos santuarios presentan rompecabezas desafiantes e ingeniosos, mucho más inspirados y variados que en el juego anterior.
The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom es un torrente de ideas que sorprende en cada momento, incluso después de más de 100 horas de juego. La sensación de descubrimiento y la cantidad de cosas por explorar son abrumadoras. El juego recompensa constantemente nuestra curiosidad y nos invita a experimentar y disfrutar de su mundo vivo y denso.
¿Cuánto dura la aventura?
Según Vandal, si queremos completar el juego completo, sin guias y sin tutoriales, las 200 horas no nos las quita nadie. Sin embargo, si vamos a por la historia principal a piñón fijo, tendremos entre 20 y 30 horas de juego aseguradas.
En resumen, Tears of the Kingdom es una experiencia de juego colosal, revolucionaria y única. Su historia épica, su jugabilidad innovadora y su mundo detallado y vivo lo convierten en un título imprescindible para los amantes de la saga y los videojuegos en general. Con cada entrega, The Legend of Zelda sigue dejando su huella en la industria del videojuego y demostrando por qué es una leyenda en sí misma.
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